Victoria alada

Autor

Lorenzo Coullaut- Valera

Época

1914

Propiedad

Publico

Descripción

Escultura de victoria alada sobre columna de 16 metros de altura con capitel compuesto, forma parte del banco corrido que para la Plaza de América diseñase Aníbal González en 1912. Pertenece a un conjunto de 16 victorias aladas, todas de piedra arenisca y de estética regionalista. Portan distintas indumentarias y atributos. Esta figura aparece levemente reclinada sosteniendo con ambos brazos una guirnalda de flores que le cubre el pelo y los hombros.

Datos históricos

La plaza de América fue proyectada por Aníbal González en 1912, con algunas variaciones introducidas en 1914. La ornamentación se completa con el conjunto de las Victorias aladas, semejantes a las de la Exposición de Turín en 1911, que remataban las columnas de los bancos corridos. El concurso para la realización de las estatuas fue convocado en 1913, el jurado no haría pública la adjudicación de la realización de las 16 victorias aladas hasta el año siguiente. A Lorenzo Coullaut Valera se le encargan seis estatuas, a Manuel Delgado Brackembury otras seis y las restantes al escultor catalán Pedro Carbonell.

Descripción del Entorno

La Plaza de América está en el Parque de María Luisa, flanqueada por el Museo de Artes y Costumbres Populares (de estilo mudéjar) por un lado y el Museo Arqueológico (de estilo renacentista) por el otro, el Pabellón Real (de estilo gótico) forma parte de otro lado. Los tres edificios nombrados de la plaza fueron construidos por Aníbal González entre 1913 y 1916 para la futura Exposición Iberoamericana de 1929. La escultura participa de una manera decisiva en la ornamentación, por todo el perímetro de la plaza se distribuyen hasta 16 esculturas de la Victoria alada sobre pedestal, elevadas en una alta columna, siendo diferentes entre sí, cada una con una característica particular. Esta escultura se encuentra en la avenida lateral del Museo de Artes y Costumbres junto a la Cafetería Bilindo.

Valoración Patrimonial

Estas esculturas tienen una especial importancia dentro de la concepción global del entorno donde se sitúan, la Plaza de América, ya que su diseño obedece a los planes proyectados por Aníbal González para este sector. Asimismo, constituyen un interesante ejemplo de mobiliario urbano y escultura de estilo regionalista. Su presencia nos remite a la celebración de la Exposición Iberoamericana de 1929. El Parque fue declarado BIC en 1983 con la categoría de Jardín Histórico.